En la gastronomía, Roma ofrece una increíble variedad de establecimientos que disponen de una gran oferta culinaria. Así se encuentra la cocina tradicional italiana en las casas de huéspedes en los barrios de Testaccio, Campo de Fiori y Trastevere o la refinada cocina judía en la judería de Roma. Incluso hay manjares exóticos en todas partes de la ciudad. No hay que olvidar la pizza en sus diversas versiones como por ejemplo la “Romana” fina y crujiente o la “Napolitana” gruesa y suave. Para comer algo rápido y barato a lo largo de las calles están la “Rosticcerie”, los chiringuitos, las tiendas de kebab o la oferta asiática de “comida para llevar”. Roma está llena de bares de vinos, cafeterías y garitos, donde los domingos se atrae a los clientes con ricos brunchs como señuelo. El verdadero gourmet no debe perderse hacer una visita al centro de negocios “Eataly” un templo del gusto culinario hecho en Italia. Eataly está situado en la antigua estación de trenes “Ostiense”. Este centro de negocios ofrece, aparte del mejor vino y la mejor comida, excelentes manjares, trabajos manuales tradicionales y artesanías artísticas a precios accesibles. Restaurantes y tiendas se enfilan uno a otro en 17.000 metros cuadrados distribuidos en cuatro pisos. Allí se pueden degustar y comprar para llevar muestras de esas golosinas o reservar un curso de cocina.
